• La modificación de la consistencia de los alimentos ayudará a tragar mejor y prevenir la desnutrición.
• Recomendaciones dietéticas en caso de DISFAGIA a sólidos:
  1.    Realizar varias comidas  al día en pequeños volúmenes (desayuno, media mañana, comida, merienda, cena y recena)
  2. Tomar los alimentos en forma de puré. Se desaconsejan los alimentos sólidos.
  3. Enriquecer los purés con leche condensada, copos de patata, salsas, clara de huevo o frutos secos molidos.
  4. Añadir un chorro de aceite de oliva al finalizar la preparación del puré
  5. Se debe procurar no dejar grumos ni hebras en los purés y asegurarse de que los purés tienen una textura homogénea.
  6. Se recomienda que los platos no sean muy voluminosos, no superar los 250 mL de volumen.
  7. Una posibilidad es utilizar la “Alimentación Básica Adaptada” (purés deshidratados instantáneos o ya preparados, así como cereales en polvo diseñados para personas adultas de venta en hipermercados o farmacias) para asegurar el aporte nutritivo de la preparación, facilitar la manipulación y conseguir una textura homogénea.
  8. Cuidar la hidratación. Se recomienda beber de 1,5 a 2 L de agua al día, las infusiones y los zumos de fruta son una buena manera de hidratarse. Se debe beber líquidos entre las comidas.
  9. Es preferrente escoger comidas de aspecto y colores atractivos, con sabores diferentes y condiméntarlas para potenciar su sabor (con especies, hierbas aromáticas, sal, azúcar,..). Es importante oler y saborear los alimentos ya que pueden aumentar el apetito y la cantidad de saliva de la    boca 

Pero, debe tener en cuenta que, si a pesar de todas estas indicaciones se pierde peso y no se recupera, se debe consultar con el dietista o especialista en nutrición.

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